Mensaje de la Coordinadora Residente

N  O  T  A

EL CONTENIDO DEL DISCURSO PUDO CAMBIAR AL MOMENTO QUE FUE PRONUNCIADO

Es un gran orgullo estar hoy con nuestras contrapartes del Gobierno y demás socios del desarrollo sostenible en Guatemala para presentarles el Informe Anual de Naciones Unidas 2020.  Gracias Ministro Brolo, Secretaria Gramajo y todos los-as Ministros-as y demás miembros del Gobierno que, bajo el liderazgo del Presidente de República, Dr. Alejandro Giammattei han confiado y nos han permitido trabajar de cerca con ustedes en abordar los desafíos que ha enfrentado el país durante el 2020 que ha sido también su primer año de Gobierno.

Con la expansión a nivel global de la pandemia causada por la COVID-19, durante el 2020, el mundo y Guatemala, enfrentaron la peor crisis sanitaria, humanitaria y de desarrollo de los últimos 100 años, lo cual ha hecho retroceder los avances alcanzados en desarrollo sostenible en muchos países.

Por otra parte, Guatemala fue afectado por las tormentas Amanda y Cristóbal; luego, los fenómenos Eta e Iota que causaron pérdidas en vidas humanas, así como daños y perdidas en los sectores social, económico e infraestructura cuyos costos se estimaron en más de Q 6,000 MN, siendo los sectores vivienda y agrícola los más afectados.

Ante este contexto, el SNU durante el 2020 dirigió sus esfuerzos para responder a los impactos de la pandemia y los desastres, con miras a proteger los resultados de desarrollo conseguidos, enfocándonos en las poblaciones más vulnerables y apoyando la recuperación socioeconómica.

El SNU brindó asistencia al país reorientando sus programas y movilizando recursos para apoyar y fortalecer el "Plan General de Atención a la Emergencia COVID-19” implementado por el Gobierno, en tres ámbitos: salud, asistencia humanitaria y recuperación socioeconómica. 

El presente Informe de los Resultados País 2020 del Sistema de las Naciones Unidas en Guatemala recoge el apoyo brindado a través de sus diferentes agencias, fondos y programas, las cuales reorientaron sus acciones y movilizaron recursos para responder a la COVID-19. Estos resultados se alcanzaron trabajando en estrecha colaboración con las instituciones del Estado y demás socios del desarrollo, para apoyar las prioridades nacionales definidas en la Política General del Gobierno, el PLANID y el Plan Nacional de Desarrollo: K'atun Nuestra Guatemala 2032.

En el ámbito de la respuesta sanitaria, el SNU brindo apoyo al Gobierno, en particular en el desarrollo e implementación de su “Plan para la prevención, contención y respuesta a casos de Coronavirus (COVID-19) en Guatemala.” 

Para brindar asistencia humanitaria a los sectores más vulnerables afectados por la COVID-19, en coordinación con el Equipo Humanitario de País (EHP), se elaboró e implementó un Plan de Respuesta Humanitaria, movilizando recursos por US$18.6 millones en los sectores de seguridad alimentaria y nutrición, agua y saneamiento, salud, educación, y protección, beneficiando a un total de 3.5 millones de personas.

En apoyo a la recuperación socioeconómica, el Equipo de País de Naciones Unidas en consulta con el Gobierno y otros los sectores de la sociedad, elaboramos un Análisis del Impacto y un Plan de Respuesta Socioeconómica (SERP) ante la pandemia.  Este Plan incluye 132 intervenciones para un total de 18 meses -hasta finales de 2021-de las cuales 76 iniciaron su ejecución en 2020, las cuales apuntan a lograr mejoras en el ODS 1 sobre reducción de la pobreza y protección social, el ODS 8 sobre la promoción del crecimiento económico y el empleo decente, la mejora del acceso a la salud pública y la atención sanitaria universal (ODS 3), todo por un monto de US$28 millones.

En respuesta a Eta y IOTA, en estrecha coordinación con la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED), se implementó una evaluación de daños y necesidades humanitarias en 74 comunidades en los departamentos de Izabal y Alta Verapaz, que fueron los más afectados. Se movilizaron recursos del CERF por $2.5 MN, se ha apoyado a 3.004 personas, y se ha trabajado para garantizar el acceso a agua potable, mediante la reparación y rehabilitación de redes de agua, limpieza / desinfección pozos y dotación de filtros.

Se atendieron flujos masivos de migrantes (caravanas) que ingresaron al país. Entre mayo a diciembre 2020, un total de 3,002 niñas y niños no acompañados y 885 acompañados fueron atendidos por las instituciones de gobierno con el apoyo de las Naciones Unidas y sus socios. Un total de 4,645 personas migrantes fueran atendidas. 

Mediante la cooperacion brindada por las Naciones Unidas en las 5 áreas programáticas bajo el UNDAF que finalizó en 2020, se contribuyó a las prioridades nacionales de desarrollo, al mismo tiempo que se contribuyó al avance en los ODS, habiendo invertido un total de US$105.7 MN, con lo cual se alcanzó un monto total de recursos  invertidos durante el ciclo programático 2015-2020 de US$535.4 MN.  Quisiera resaltar algunos de los logros del 2020 en estas 5 áreas.

En el área Desarrollo Inclusivo y Sostenible se implementaron iniciativas económicas locales incluyendo la conservación de recursos naturales; se apoyó el empoderamiento económico de cerca de 5,000 mujeres rurales, fortaleciendo su resiliencia y capacidad de recuperación económica; emprendimientos agrícolas y no agrícolas de organizaciones de productores mejorados; fortalecidos el manejo de cuencas y desarrollo comunitario en comunidades. También se avanzó en el fortalecimiento de las capacidades municipales y locales para la reducción de desastres. Esto contribuyo a los ODS 8 10, 11, 13, 14 y 15 sobre el empoderamiento económico y la mitigación de las desigualdades.

El área de Desarrollo Social abordó salud, educación, seguridad alimentaria; y protección social. Se lograron importantes avances en el acceso a servicios de salud primaria integrales, con calidad y pertinencia, el equipamiento de servicios de salud y la atención en el primer nivel; en la implementación la promoción de la lactancia materna; la atención de personas viviendo con VIH; en el acceso y la continuidad de la educación en el contexto de la pandemia, logrando disminuir la deserción escolar; en la Gran Cruzada por la Nutrición, incluyendo las brigadas de nutrición, educación en nutrición, asistencia alimentaria-nutricional; implementación del programa de transferencias Bono Familia, entre otros. Esto contribuyó a los ODS2, 3, 4, 8.

En el área Sociedad Segura y Libre de Violencia sobresale la articulación entre sociedad civil e instituciones municipales para implementar estrategias de prevención de la violencia, la reactivación de la Coordinadora Nacional para la Prevención de la Violencia Intrafamiliar y contra las Mujeres (CONAPREVI), iniciativas para la protección de defensores de derechos humanos, aporte en la creación de modelos de atención integral a niñez en casos de violación de sus derechos, y especialmente, promoción de la atención integral de mujeres víctimas de violencia. Esto contribuyó a los ODS 5 y 16. El SNU también contribuyó a mejorar la producción de datos y análisis sobre Seguridad Ciudadana con enfoque multidimensional y de género. A lo largo del año se presentaron análisis trimestrales tales como: Seguridad Ciudadana, Movilidad Humana y Desarrollo.

El área programática Justicia para todas las Personas, se fortaleció el Ministerio de Publico y sus capacidades técnicas e institucionales para investigación, persecución penal de casos y persecución penal de graves violaciones de los derechos humanos. En relación con poblaciones en situación de vulnerabilidad vinculadas a justicia, nuestra cooperación se enfocó en mujeres víctimas de violencia, así como la puesta en marcha y fortalecimiento de la Fiscalía contra el Delito del Femicidio y otras formas de violencia contra la mujer, creada en agosto de 2016. Esto contribuyó a los ODS 5 y 16

En el área Sociedad Multicultural y Diversa se dio énfasis a la protección de derechos de poblaciones en situación de vulnerabilidad, especialmente personas LGBTIQ+, personas viviendo con VIH SIDA y pueblos indígenas. También se fortaleció al Tribunal Supremo Electoral (TSE) en el desarrollo de una política de equidad de género y se impulsó la reforma a la ley Electoral y de Partidos Políticos para incluir la paridad, la alternabilidad y la participación de los Pueblos Indígenas. Además, se implementaron acciones orientadas a combatir la discriminación, a la aprobación de medidas afirmativas y a la aplicación de estándares internacionales de derechos humanos en diferentes temáticas. Esto contribuyó a los ODS 5 y 16.

Las alianzas estratégicas fueron un vehículo importante para la consecución de los resultados colectivos planteados por el SNU para el ciclo de programación 2015-2020, así como para avanzar en el logro de los ODS. Específicamente, en 2020, en medio de una crisis sanitaria, económica y social sin precedentes, el SNU en Guatemala potenció las alianzas estratégicas como mecanismo para evitar los efectos adversos sobre el progreso de los ODS, a la vez que hizo una apuesta mayor por fortalecer el vínculo entre las intervenciones humanitarias, de desarrollo y de consolidación de la paz. Estas alianzas se materializaron hacia dentro entre las diferentes Agencias, Fondos y Programas, y hacia afuera involucrando a los sectores público y privado, a organizaciones de la sociedad civil, y fundamentalmente a las comunidades y personas guatemaltecas.

Con el objetivo de establecer sinergias y complementariedades que conduzcan a catalizar inversiones necesarias para acelerar los ODS en el país, durante 2020 el SNU formalizó alianzas estratégicas con el Ministerio de Relaciones Exteriores (MINEX) para el tema de movilidad humana, con la Contraloría General de Cuentas para temas de transparencia y rendición de cuentas, así como también con el sector privado como es el caso de Empresarios por la Educación. Además, el SNU renovó su alianza con la Fundación Tigo y el Consejo Nacional del Deporte, la Educación Física y la Recreación, e inició un proceso para ampliar el trabajo colaborativo entre Banrural y diferentes Agencias, Fondos y Programas. Finalmente, se continuó potenciando el trabajo del Sistema de las Naciones Unidas con el Pacto Global Red Guatemala, principalmente en las áreas de igualdad de género y empoderamiento de las mujeres, medio ambiente y transparencia.

La elaboración y suscripción de parte del Gobierno de Guatemala y de las Naciones Unidas del “Marco Estratégico de Cooperación para el Desarrollo Sostenible 2020-2025” (MC) fue un logro fundamental del 2020, gracias al trabajo conjunto que realizamos, liderado por SEGEPLAN y la Oficina de la Coordinación Residente, se logró un alto nivel de participación y apropiación de parte de las instituciones gubernamentales, lo cual permitió el alineamiento de este MC con el PLANID y la Política General de Gobierno, identificando los desafíos, las áreas programáticas con sus objetivos y estrategias de intervención, junto con la identificación de las poblaciones prioritarias. Este MC también se nutrió de un amplio proceso de consultas y aportes de distintos sectores de la sociedad, incluyendo a pueblos indígenas, mujeres, jóvenes, personas con discapacidad, personas en movilidad humana, sector privado, constituyentes tripartitos de la OIT y donantes.  

En 2021, seguiremos construyendo sobre los logros del 2020 bajo el nuevo Marco de Cooperación vigente hasta 2025, continuando con el apoyo a políticas y programas que contribuyan a la recuperación socioeconómica en respuesta a los impactos de la pandemia y los desastres Eta y Iota con enfoque de inclusión y sostenibilidad, así como soluciones a problemas estructurales que requieren atención en diferentes áreas del desarrollo. Entre las prioridades que continuaremos apoyando están: la Gran Cruzada Nacional por la Nutrición; un registro de hogares sensible al género, para mejorar la eficiencia de las acciones de protección social; el acceso a servicios de salud y educación, en particular para apoyar el retorno de los estudiantes a las escuelas y la respuesta del sector salud ante la COVID-19, los mecanismos de protección y prevención de la violencia, acceso a la justicia, la gestión de los recursos naturales y el cambio climático, el aumento de la producción agrícola, políticas para una recuperación verde, políticas para la inclusión de las personas con discapacidad, entre otras.

Es muy alentador que Guatemala continuará siendo beneficiario del Fondo para la Consolidación de la Paz. En octubre de 2020, el Secretario General de las Naciones Unidas aprobó la elegibilidad del país, en respuesta a la solicitud enviada por el Sr. Presidente de la República. Esto significa que, las Naciones Unidas continuará apoyando el fortalecimiento del Estado de Derecho, la lucha contra la impunidad, el acceso a la justicia, la independencia judicial y el abordaje de la conflictividad territorial, promoviendo el nexo entre el desarrollo sostenible, la acción humanitaria y la paz.

Ahora que Guatemala presentara su tercer Examen Nacional Voluntario sobre el cumplimiento de los ODS alineados con las prioridades nacionales de desarrollo y que contamos con un nuevo Marco de Cooperación, debemos aprovecharlos como una gran oportunidad para reconstruir mejor después de la pandemia, fortaleciendo las alianzas entre todos los sectores y promoviendo el diálogo y la búsqueda de consensos para lograr las transformaciones sociales, económicas, institucionales y políticas que se necesitan y avanzar más aceleradamente para lograr el bienestar y los derechos humanos de toda la población, haciendo realidad el principio de no dejar a nadie atrás.

Como SNU estamos listos para seguir acompañando a Guatemala en su ruta hacia el desarrollo sostenible y lograr así una sociedad con igualdad, inclusión y dignidad para todas y todos.

Muchas gracias.