Discurso
76 años de la ONU
21 octubre 2021
Mensaje de la Coordinadora Residente del Sistema de las Naciones Unidas en Guatemala, Sra. Rebeca Arias Flores, en el Ministerio de Relaciones Exteriores
ESTE MENSAJE PUDO CAMBIAR AL MOMENTO DE PRONUNCIARSE
- Es un privilegio estar en este lugar y celebrar el aniversario de las Naciones Unidas junto al Gobierno de Guatemala, porque muestra parte de la excelente relación que gozamos. Durante los últimos años hemos tenido el privilegio de compartir esta fecha con el Sr. Canciller Pedro Brolo y nos complace reconocer el compromiso y apoyo de Guatemala como Estado miembro por sus contribuciones a la organización y por permitirnos trabajar juntos abordando las prioridades nacionales para lograr el bienestar de su población.
- Así que es un honor compartir con ustedes la celebración de los 76 años de entrada en vigencia de la Carta de las Naciones Unidas. Una Carta que en su artículo 55 tienen impregnado una razón muy importante para Guatemala: “Con el propósito de crear las condiciones de estabilidad y bienestar necesarias para las relaciones pacíficas y amistosas entre las naciones, basadas en el respeto al principio de la igualdad de derechos y al de la libre determinación de los pueblos, la Organización promoverá: niveles de vida más elevados, trabajo permanente para todos, y condiciones de progreso y desarrollo económico y social; la solución de problemas internacionales de carácter económico, social y sanitario, y de otros problemas conexos; y la cooperación internacional en el orden cultural y educativo; así como el respeto universal a los derechos humanos y a las libertades fundamentales de todos, sin hacer distinción por motivos de raza, sexo, idioma o religión, y la efectividad de tales derechos y libertades.”
- 76 años después vemos que la Carta estaba hablando de varios de los problemas que persisten en nuestra sociedad. Hoy, al leer la Agenda Común que acaba de presentar el Secretario General, constatamos que las Naciones Unidas se ha preocupado porque los documentos que se firman no se queden en el papel, sino que se vuelvan realidad en las vidas de las personas.
- Es un informe con una visión de cómo puede adaptarse el multilateralismo a las amenazas del siglo XXI: la pandemia, la crisis climatica, las desigualdades entre otras. Invita a un compromiso renovado de generación de los bienes públicos globales necesarios para el futuro de la humanidad y del planeta, basado en la solidaridad entre naciones, pueblos y generaciones.
- Contiene una invitación expresa para las y los jóvenes a participar activamente como “diseñadores de su propio futuro”. Las instituciones globales deben estar a la altura del principio de participación con igualdad e inclusión, ofreciendo una mayor participación a los países en desarrollo y su juventud. También se han explorado los desafíos que amenazan a las generaciones futuras, personas todavía sin nacer, cuyas vidas se verán influenciadas por las decisiones que tomemos hoy.
- La Agenda Común es una agenda de acción pensada para acelerar la implementación de los acuerdos existentes, incluidos los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Es hora de volver a apostar por la solidaridad mundial y hallar nuevas formas de trabajar hombro a hombro por el bien común. Por ejemplo, debe reforzarse el plan mundial de vacunación, con el que se administren las vacunas contra la COVID-19 a los millones de personas a quienes aún no se les ha podido ofrecer. Respiraríamos más profundamente si se alcanzara pronto un 80 por ciento de población con sus dosis completas de la vacuna.
- El Secretario General insiste que en esta Agenda se deben tomar medidas urgentes y resueltas para afrontar la crisis triple que está destruyendo nuestro planeta: la disrupción climática, la pérdida de biodiversidad y la contaminación.
- La Agenda Común nos recuerda que es hora de renovar el contrato social entre los Gobiernos y la población, y dentro de cada sociedad, para restaurar la confianza y abrazar una concepción amplia de los derechos humanos. La gente necesita resultados concretos en su vida cotidiana. En ese sentido, debe trabajarse más y mejor en la igualdad de género y en el empoderamiento de las mujeres y las niñas, sin las cuales es imposible lograr un verdadero contrato social. No debemos seguir tomando decisiones sin considerar a más de la mitad de la población representado por las mujeres.
- Debemos entrar pronto a la era en que se universalicen la protección social, la cobertura sanitaria, la educación, la formación profesional, el trabajo decente y la vivienda, así como el acceso a Internet como derecho humano fundamental.
- Urge corregir errores sobre como medimos la prosperidad económica y el progreso. Cuando las ganancias se obtienen a expensas de las personas y de nuestro planeta, nos quedamos con un panorama incompleto del verdadero costo del crecimiento económico. Tal como se mide ahora, el producto interno bruto (PIB) no reflejan los impactos humanos y ambientales que generan algunas actividades económicas.
- La Agenda contempla propuestas sobre como reutilizar el Consejo de Administración Fiduciaria, establecer un Laboratorio de Futuros, aprobar una Declaración sobre las Generaciones Futuras, y crear la figura de una persona como Enviada Especial de las Naciones Unidas que vele por que las decisiones presupuestarias y políticas, que tenga en cuenta las repercusiones de los acuerdos de la época actual sobre las generaciones futuras.
- Los 193 Estados miembros de la ONU tienen el reto de cumplir los 12 compromisos de la Agenda Común. Es posible que nosotros ya no veamos los efectos de las decisiones que se toman ahora, pero estoy segura de que si pudiéramos vivir un siglo más podríamos sentir satisfacción por lo logrado o frustración por no haber convencido a más personas y líderes para empujar esta agenda.
- Hoy quiero compartirles que estoy finalizando mi misión como CR de Naciones Unida en Guatemala, después de 5 anos de servicio. En el cumplimiento de mi misión por este bello país, he podido establecer relaciones de trabajo y de amistad muy fructíferas con distintos sectores de la sociedad. Me siento privilegiada de haber podido acompañarles en diferentes momentos de su historia reciente. He sido testiga del trabajo incansable y la aspiración de la sociedad por consolidar la paz, mejorar el desarrollo humano de la población y adaptarse al mundo cambiante en el que vivimos.
- Desde mi llegada dediqué la mayor cantidad de tiempo a trabajar muy de cerca con las instituciones nacionales, en el fortalecimiento de la relación mediante nuestras más de veinte agencias, fondos, programas y organismos especializados, bajo la Reforma de las Naciones Unidas trabajando como un solo equipo. Liderar el Equipo de País, en medio de los cambios propios de la Reforma y la aparición de la pandemia, los desastres, entre otros imprevistos, ha sido una ardua labor que nos ha planteado desafíos pero también nos ha traído logros y satisfacciones. Firmamos un nuevo Marco Estratégico de Cooperación 2020-2025 con el Gobierno, con base a un Análisis Común de País, en un proceso de co-creacion con las instituciones nacionales lo cual es esencial para la apropiación nacional y fortalecer el trabajo coordinado de nuestras agencias con las instancias de Gobierno, sector privado y sociedad civil. Hemos implementado el Marco de Cooperación 2015-2019 apoyando el diseño e implementación de políticas publicas en sectores clave como educación, seguridad alimentaria y nutrición, salud, protección social, gestión del medio ambiente, empoderamiento de las mujeres, fortalecimiento del sector justicia y seguridad, fortalecimiento de la gestión publica, entre otros, buscando avanzar en el logro de los ODS.
- Con la llegada a Guatemala de la pandemia de la COVID-19, realizamos un análisis del impacto socioeconómico y un plan de respuesta. Nos habíamos dado cuenta de que la pandemia es mucho más que una crisis de salud, pues afecta a las sociedades y economías. Por eso, esta crisis ha sido abordada en sus tres dimensiones: atender con urgencia la emergencia sanitaria, centrarnos en el impacto social, junto a la respuesta económica, y apoyar la recuperación inclusiva a través de un esfuerzo interagencial.
- En medio de esa respuesta debimos atender otras emergencias. En medio de la pandemia, miles de familias fueron afectadas por los fenómenos de ETA e IOTA. Como Equipo Humanitario de País logramos atender las principales necesidades humanitarias de la población afectada.
- Deseo hacer un reconocimiento especial por el apoyo recibido del Ministerio de Relaciones Exteriores dirigido por el Canciller Pedro Brolo y de la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia liderado por la señora Keila Gramajo, porque hicieron posible ese y otros logros. Hago extensivo el reconocimiento a sus equipos de trabajo, así como a los de los ministerios y secretarías, así como otros funcionarios y funcionarias de diferentes instituciones del Estado por sus aportes. Y desde luego a la sociedad civil, pueblos indígenas, mujeres, jóvenes, personas con discapacidad, y al sector privado por mantener un diálogo abierto para orientar nuestro trabajo y por las alianzas establecidas para lograr los propósitos de la Agenda de Desarrollo Sostenible y los 17 ODS.
- Asimismo, deseo agradecer y reconocer el trabajo del SNU en Guatemala cuyo dedicación y compromiso con la población guatemalteca mas excluida y vulnerable han quedado demostrados en los resultados alcanzados en estos anos.
- Ha sido una misión con grandes lecciones. He aprendido mucho de los diálogos con poblaciones indígenas, con organizaciones de mujeres, he visto como organizaciones de personas con discapacidad procuran su inclusión y he escuchado las voces de las personas que viven en las áreas más lejanas de la capital. También he escuchado a las personas migrantes y su aspiración de forjarse un mejor futuro. He participado en incontables charlas con jóvenes con mucho interes y deseo de aportar al desarrollo sostenible del país. De todo lo que he visto y escuchado saco una conclusión: Guatemala es un país con personas maravillosas, laboriosas, solidarias, poblaciones que, aunque han sufrido mucho, tienen la firme determinación de salir adelante y ayudar a los demás. Solo se necesita que la sociedad logre un consenso del país que quiere dejarle a las futuras generaciones y la ruta a seguir para alcanzar una sociedad mas justa, sostenible, inclusiva y equitativa donde no dejemos a nadie atrás.
- Estamos en un día de celebración, es el aniversario del organismo multilateral más grande y decisivo que la humanidad haya podido crear para mantener la paz, la seguridad, el respeto a los derechos humanos y procurar el desarrollo sostenible para todos y todas. Es el día de la ONU, es el día de todos, pues podemos incidir en lograr que nuestra organización se siga fortaleciendo para hacer realidad todos los compromisos y decisiones para resolver los grandes problemas que enfrenta la humanidad mediante el multilateralismo.
- Muchas gracias a la cooperación internacional por continuar brindando su apoyo a Guatemala, que al ser país de renta media ya no es objeto de atención prioritaria en el financiamiento para el desarrollo. Nuestro reconocimiento por ese esfuerzo y el agradecimiento por confiar en el sistema de las Naciones Unidas en Guatemala. Seguiremos trabajando bajo los más altos estándares de transparencia y rendición de cuentas, sobre todo, para procurar que cada dólar canalizado por nuestro medio signifique una mejora substancial en muchas vidas.
- Por eso, al terminar mi mensaje de hoy, en la última celebración de aniversario como Represente del Secretario General y Coordinadora Residente del sistema de las Naciones Unidas en Guatemala, lo hago con una reflexión. La semana pasada conmemoramos el día internacional de la erradicación de la pobreza. En ese marco, junto a las organizaciones integrantes del Comité 17 de Octubre se llevó a cabo un acto de reconocimiento a la señora María Emiliana López, por ser ejemplo de vida y luchar por la dignidad de las personas que viven en condiciones de alta vulnerabilidad. Y allí se declamó un poema que luego me hicieron llegar a la oficina. El mismo es de coautoría y adaptación de la escritora Carolina Escobar Sarti, del cual extraigo este breve texto:
“Hemos roto cadenas. Nuestros hijos e hijas ya probaron otros alimentos y tienen la enseñanza de ayudar al prójimo.
Luchamos por ellos, por nosotros mismos para demostrar que sí podemos.
Es nuestro esfuerzo, nuestra lucha, porque para ellos queremos puertas abiertas, trabajos dignos y sueños.
No áreas rojas de miseria.
Queremos para ellos todo, el alimento, el techo, la comunión
y la vida. Primero siempre la vida.”
MUCHAS GRACIAS.
Entidades de la ONU involucradas en esta iniciativa
OCR
Oficina del/de la Coordinador/a Residente
Otras entidades involucradas en esta iniciativa
ABL
Abt Britain Limited